CONDUCTA:
CONCEPTOS GENERALES
Etimológicamente, la palabra conducta: En latín es conductus / conducire, que significa "conducida o guiada".
En griego es anastrofe, refiriéndose a la “forma de vida” o “manera de vivir”
La conducta son todas aquellas acciones conducidas o guiadas por el entorno (social, familiar, ambiental, cultural).
La conducta engloba el área mental, físico-motora, emocional y lo cognitivo, y nos permite actuar sobre ella, ya que es una realidad tangible y accesible.
Hay muchas páginas, organizaciones, libros y autores que definen una infinidad de tipos de conducta, de los cuales puedo resumir que:
1. La conducta puede ser innata (nace).
2. La conducta puede ser adquirida (se aprende).
3. La conducta puede ser manifiesta/observable (en las acciones).
4. La conducta puede ser encubierta en los pensamientos o emociones (preocupación, alegría, tristeza).
5. La conducta puede ser positiva o negativa dependiendo del contexto y entorno donde se desarrolle y manifieste.
MODIFICACIÓN DE CONDUCTA
Las técnicas de modificación de la conducta tienen como objetivo cambiar o modificar el comportamiento de un individuo con una intervención psicológica, psicoterapeuta y a través de la neuroplasticidad cerebral.
¿Cómo?
Partiendo del origen y las causas que influyen en la aparición y formación de la conducta manifestada.
Cabe destacar, que la modificación de conducta no solo se centra en conductas observables, sino también en aspectos cognitivos, emocionales y procesos básicos implicados en su origen, desarrollo físico, entorno familiar y social.
Para lograr lo anteriormente expuesto, es necesario:
1. Reconocer el fenómeno o acción que originó la conducta (raíz del problema).
2. El estado conductual (mental-emocional) de la persona en el proceso de cambio (condición, cómo está).
3. El contexto (familiar, social, educativo, político, religioso) que rodea a la persona, una evaluación precisa (perfil conductual) y programas de intervención individualizados.
MODIFICACIÓN MOLDEAMIENTO Y CAMBIO DE LA CONDUCTA.
Todo mensaje o programa que abogue a favor de un cambio en la conducta debe llevarse a cabo de manera profunda, delicada y exigente a la vez. Un modificador de conductas NO PUEDE conformarse con que la persona se comporte mejor en la sociedad, porque esto no dice que está libre del problema conductual.
Si el proceso de modificación de la conducta humana se enfoca en lo externo (lo que hace) sin modificar lo interno (lo que piensa y cree) el resultado será ineficiente.
Las personas que manifiestan problemas conductuales originados por algún fenómeno (familiar, social, educativo...) desarrollan formas de conducta (antisociales, desviadas o delictivas) con el fin de enfrentarse a su angustia, librarse de sus "problemas" y satisfacer su "necesidad":
"Quítele al alcohólico las bebidas etílicas y tendrá un alcohólico sobrio."
Estas personas tienen necesidades legítimas pero tratan de satisfacerlas de manera equivocada.
Cuando deseamos intervenir para obtener un cambio real en la conducta de un individuo, no podemos quedarnos sólo con el nivel conductual final (establecer normas, límites, refuerzos, castigos...) sino que debemos ir a la raíz, reconocer y atender si hay una causa emocional que antecede a la conducta manifestada que propicia un comportamiento:
El temor, la ira, la frustración, tristeza o depresión y lo que las origina, forman parte del proceso de modificación y orientación de conductas.
Entonces, la conducta se moldea gradualmente, dependiendo de cada caso y persona, incentivando y provocando de forma progresiva el patrón de conducta deseado. El moldeamiento conductual (positivo o negativo) es una experiencia común entre las personas todos los días de la vida.
Ejemplo:
1. Un padre que pronuncia una palabra y su hijo intenta imitarlo.
2. Un padre que enseña a su hijo a pelear para defenderse y refuerza esa acción conductual con una felicitación.
Esto, dependiendo de lo que se quiere lograr conductualmente, puede verse positiva o negativamente.
CONDUCTA Y NEUROPLASTICIDAD
La conducta es conducida o guiada por diferentes fenómenos y es moldeable conforme a lo que se quiere lograr que cada persona aprenda, asuma, corrija o mejore, porque cada individuo aprende a actuar bajo un patrón conductual influenciado.
La neuroplasticidad en el cerebro permite a las neuronas regenerarse tanto anatómica como funcionalmente y formar nuevas conexiones sinápticas.
Para la modificación de conductas, la neuroplasticidad cerebral es una de las herramientas que ayuda en la adquisición de capacidades cognitivas. Por lo tanto, esta tiene la facultad de moldear el cerebro para que logre desechar patrones de conducta negativos y adquiera, mantenga y logre los nuevos aprendizajes.
En el próximo modulo desarrollaremos las funciones cerebrales que nos permiten entender la conducta humana.